¿Cómo puedo saber si necesito gafas?
No siempre es fácil saber cuándo se necesitan gafas.
Los cambios en la visión pueden ser difíciles de percibir. Rara vez aparecen de un día para el otro. Algunos ejemplos son visión borrosa, problemas para leer la letra pequeña o los letreros de la calle, o dificultades con la visión nocturna.
En cambio, es probable que experimente una reducción muy gradual de su agudeza visual, de la cual puede que no se percate al principio. Puede que empiece a entrecerrar los ojos o experimentar fatiga ocular, dolores de cabeza u otras molestias que no tenía antes.
“Los síntomas clásicos de la necesidad de gafas incluyen dolores de cabeza, dolores de ojos, fruncir el ceño y entrecerrar los ojos”, dice el profesional del cuidado ocular Agustín González, optómetra de la FAAO. “Los destellos y las moscas volantes, la pérdida de visión repentina o el dolor ocular son cosas que deberían examinarse de inmediato”.
Otros signos y síntomas que pueden indicar que necesita gafas incluyen la necesidad de más luz para ver o leer con claridad, ver halos alrededor de las fuentes de luz (como faros de automóviles y bombillas), perderse al leer y visión distorsionada o diplopía.
Signos de que podría necesitar gafas
Los problemas de visión y las afecciones oculares más comunes que le harán pensar que necesita gafas (o un cambio en su prescripción de gafas actual) incluyen:
Miopía, que hace que sea difícil ver objetos distantes con claridad. Los miopes suelen ver bien para las tareas que requieren ver de cerca.
Hipermetropía, una afección en la que centrarse en objetos cercanos o realizar tareas que requieren ver de cerca es un desafío, pero en la que la visión de lejos es normal.
Presbicia, definida como la pérdida normal de la capacidad de enfoque cercano que le ocurre a la mayoría de las personas en algún momento después de los 40 años.
Cataratas, es decir, opacidades del cristalino natural del ojo, que son la causa más común de pérdida de la visión en personas mayores de 40 años. Las cataratas se tratan con cirugía y la implantación de una lente intraocular (LIO).
Los síntomas del síndrome visual informático causados por el uso excesivo de dispositivos electrónicos con pantallas visuales, incluidos teléfonos inteligentes, ordenadores y tabletas, también pueden ser un indicio de que necesita gafas.
La fatiga ocular, la sequedad ocular, la visión borrosa, el enrojecimiento de los ojos, la quemazón, la sensibilidad a la luz, los dolores de cabeza y el dolor en los hombros, el cuello y la espalda son síntomas del síndrome visual informático.
Cualquiera que pase una buena parte del día mirando pantallas LED corre el riesgo de desarrollar esta afección, incluidos los niños. Existe tratamiento para el síndrome visual informático, incluida la prescripción de gafas para el ordenador.
¿Necesita gafas? Visite a un profesional del cuidado ocular.
La mejor manera de saber con certeza si necesita gafas es buscando a un profesional del cuidado ocular en su área y programando una exploración oftalmológica completa. Consultar a un profesional del cuidado ocular es especialmente importante si tiene alguno de los problemas de visión descritos anteriormente.
Esta es la única persona que puede determinar si necesita gafas (y posiblemente otros tratamientos para resolver sus síntomas).
Durante su exploración oftalmológica, González aconseja que sus pupilas estén dilatadas para proporcionar la ”ventana abierta” óptima a través de la cual su profesional del cuidado ocular podrá mirar directamente a sus ojos para evaluar su salud ocular.
“A pesar de que existe una gran cantidad de tecnología que permite obtener imágenes de las áreas ocultas del interior del ojo, la dilatación mejora la calidad de la imagen”, dice.
La buena visión es esencial para prácticamente todos los aspectos de una vida normal. Someterse a una exploración oftalmológica anual es la mejor manera de mantener una visión saludable y anticiparse a los problemas oculares que puedan surgir en el futuro.
Página publicada en lunes, 11 de octubre de 2021