¿Los lentes de contacto pueden dañar sus ojos?
Los lentes de contacto son muy seguros. Aun así, usar lentes de contacto puede dañar sus ojos si los lleva puestos demasiado tiempo, no los limpia adecuadamente o no los reemplaza como le indica su profesional del cuidado ocular.
En Estados Unidos, Europa y gran parte del mundo, los lentes de contactos se consideran dispositivos médicos. Esto se debe a que los lentes son una forma de corrección de la visión que está en contacto directo con el ojo. Como tal, son supervisados por agencias reguladoras como la FDA de Estados Unidos, la Comisión de la Unión Europea y otras organizaciones nacionales o internacionales que se ocupan de la seguridad pública.
Aunque en algunos países es posible conseguir lentes de contacto sin una prescripción de lentes de contacto, no es una buena idea. Para conseguir lentes de contacto debe visitar siempre a un profesional del cuidado ocular y asegurarse de que se ajustan correctamente y que se han fabricado de forma segura.
Mantenga el flujo de oxígeno a sus ojos
Los lentes de contacto descansan directamente sobre el ojo y cubren toda la córnea (o, en el caso de los lentes de contacto permeables al gas, parte de la córnea), y, por ese motivo, reducen la cantidad de oxígeno que llega a los ojos desde el exterior. Un buen suministro de oxígeno es esencial para mantener los ojos sanos.
Puede limitar los efectos potencialmente dañinos de la privación de oxígeno que causan los lentes de contacto haciendo lo siguiente:
Respete el programa de uso que recomienda su profesional del cuidado ocular y deshágase y reemplace sus lentes de contacto como le indican.
A lo mejor también le interesa elegir los modernos lentes de contacto de hidrogel de silicona. Estos lentes blandos se elaboran con un material que trasmite más oxígeno que los materiales de los lentes de contacto blandos convencionales y pueden ser más seguros para sus ojos a largo plazo.
Otra opción son los lentes de contacto rígidos permeables al gas. Los lentes de contacto permeables al gas tienen un diámetro más pequeño que los lentes blandos o los lentes de hidrogel de silicona y, por lo tanto, cubren menos córnea. Además, los lentes de contacto permeables al gas se mueven bastante al parpadear y permiten que las lágrimas frescas se muevan debajo del lente. Estos dos factores reducen el riesgo de problemas oculares con los lentes permeables al gas, en comparación con usar lentes de contacto blandos.
Limpie sus lentes de contacto y el estuche
Los lentes de contacto también incrementan el riesgo de daño ocular porque las bacterias y otros agentes que causan infecciones pueden acumularse en los mismos. Esto es especialmente cierto cuando los lentes envejecen y se acumulan depósitos en las superficies delanteras y traseras de los lentes.
Según el Brien Holden Vision Institute, solo se producen infecciones oculares en unas 4 de cada 10 000 personas que utilizan lentes de contacto diarios (0,04 %) y 20 de cada 10 000 personas que usan lentes de contacto de uso extendido durante toda la noche de forma regular (0,2 %), pero los efectos pueden ser devastadores.*
Usted puede reducir significativamente el riesgo de infecciones oculares relacionadas con los lentes de contacto si limpia y desinfecta adecuadamente sus lentes de contacto después de cada uso. Use solamente las soluciones para lentes de contacto que recomiende su profesional del cuidado ocular y no cambie de marca sin consultarle antes.
Aunque la mayoría de los usuarios de lentes de contacto utilizan soluciones para lentes de contacto "sin frotar", recientes estudios muestran que estos productos limpian sus lentes mucho mejor si frota los lentes cuando los está aclarando con la solución. (Estos productos de un solo paso también se denominan "soluciones multiuso" porque contienen ingredientes que limpian y desinfectan los lentes de contacto.)
También es muy importante enjuagar el estuche de almacenamiento de los lentes con solución fresca para lentes de contacto y dejar secar el estuche al aire mientras lleva puestos los lentes de contacto. Esto reduce el riesgo de que el estuche se contamine con microorganismos que puedan dañar sus ojos. También debería deshacerse y cambiar el estuche de almacenamiento como mínimo cada tres meses.
Además, utilice siempre solución multiusos fresca cuando guarde los lentes. No "rellene" la solución que ha dejado en el estuche del día anterior. Hacerlo disminuye la efectividad de la solución, y posiblemente conduzca a la contaminación del lente y a una grave infección ocular.
Respete el calendario de recambio de los lentes de contacto
Evite un uso excesivo de los lentes de contacto y asegúrese de deshacerse de ellos y cambiarlos siguiendo las indicaciones de su profesional del cuidado ocular.
Incluso si cuida sus lentes como se indica, con el tiempo se acumulan depósitos en ellos. Cuanto más tiempo espere para cambiar de lentes de contacto, hay más potencial de que los depósitos en los lentes reduzcan el suministro de oxígeno a sus córneas y dañen sus ojos.
Por último, asegúrese de ver a su profesional del cuidado ocular según se indica, para las exploraciones oftalmológicas rutinarias para lentes de contacto. Su profesional del cuidado ocular puede detectar pequeños problemas antes de que lleguen a ser importantes, y ayudarle a mantener los ojos sanos y seguros cuando use lentes de contacto.
* Los agentes antimicrobianos tienen como objetivo los estuches de las lentes de contacto para reducir la infección. Brien Holden Vision Institute. Comunicado de prensa publicado en julio de 2011. (El BHVI está afiliado a la School of Optometry and Vision Science de la University of New South Wales de Sídney, Australia.)
Página publicada en martes, 26 de enero de 2021